La reina Victoria, que sostuvo la corona durante 63 años (1838-1901), eligió esta ciudad al sureste de Ontario, como capital en 1857, porque estaba a medio camino de la parte francófona y anglófona y relativamente lejos de Estados Unidos, que parecían con ganas de invadir. Una leyenda urbana cuenta que le dieron un mapa a la reina del imperio británico y puso una chincheta al azar. Nadie encontraría la capital en caso de querer tomarla. Canadá es el segundo país más grande del mundo después de Rusia. Se enorgullece de su origen multicultural. Mientras escribo estas líneas, una chica trilingüe habla por teléfono a mi lado.